LA LEY OLIMPIA: EL COMBATE CONTRA LA VIOLENCIA DIGITAL  EN AMÉRICA LATINA

LA LEY OLIMPIA: EL COMBATE CONTRA LA VIOLENCIA DIGITAL EN AMÉRICA LATINA

Por Carmen Frutos Aragóngraduada en ciencia política y administración publica, máster en estudios interdisciplinares de género y en prevención de maltrato y violencia de género

En 2014 la mexicana Olimpia Coral Melo fue víctima de una de las violencias digitales más comunes (sobre todo entre mujeres): descubrió que circulaba por las redes sociales un vídeo publicado sin su consentimiento, donde mantenía relaciones sexuales y se la podía ver desnuda.

La grabación la realizó en 2013, con su entonces novio, cuando ella tan solo tenía 18 años, si bien él no se reconoce en el vídeo. Él negó haberlo filtrado, pero en cuestión de días se viralizó. El periódico local de Huachinango, Puebla, se lucró de este vídeo y llegaron a referirse a ella como “la gordibuena de Huachinango” 

Todo el acoso que recibió Olimpia Coral hizo que estuviera encerrada en su casa sin salir más de 8 meses y que intentara suicidarse hasta en 3 ocasiones. En una entrevista que dio en 2019 relataba:

“Lo que yo quería era dejar de verme, que dejaran de nombrarme (…) En cada like, en cada compartir y en cada me divierte era un golpe, no necesitaba verme físicamente para hacerme daño”.

Con el tiempo Olimpia Coral reflexionó sobre su situación y, también gracias al apoyo de su madre, se dio cuenta de que había sido una víctima y que, sin embargo, ninguna ley amparaba su situación. Motivada por su experiencia personal y este vacío legal, decidió empezar su activismo contra la violencia digital.

 

De lo personal a lo institucional

Olimpia comenzó a buscar a más mujeres victimas de este tipo de violencia. Poniendo todos los relatos en común comenzó a redactar un proyecto de ley para empezar a cubrir la violencia digital. Pese a las dificultades, siempre se mantuvo fiel a su decisión de abordar lo que había vivido de manera frontal, y el movimiento feminista le apoyo en todo el proceso.

Poco a poco Olimpia fue dando a conocer su historia y haciendo ruido, de tal forma que páginas en plataformas donde se encontraba su vídeo sexual tuvieron que ser cerradas o eliminadas. Comenzó también a buscar apoyo dentro del gobierno, pero los políticos se negaban a ayudarla y a difundir su historia. Después de mucha presión y difusión, en 2021, se aprueba la Ley Olimpia, que castiga la violencia digital en México y ha inspirado leyes similares en la región de América Latina. 

Esta ley es en realidad un conjunto de reformas de otros instrumentos jurídicos en materia de violencia digital, con una perspectiva de género. Introduce dos cambios legislativos: el reconocimiento de la violencia digital en la Ley General de Acceso a las Mujeres a una Vida Libre de Violencia y la tipificación del delito contra la intimidad sexual en los Códigos Penales, para castigar la difusión y producción de contenidos íntimos sexuales sin el consentimiento o autorización, así como las amenazas y la extorsión.

Las conductas que atentan contra la intimidad sexual y están sancionadas son múltiples: grabar vídeo, grabar audio, fotografiar o elaborar videos reales o simulados de contenido sexual íntimo, de una persona sin su consentimiento o mediante engaño... También, exponer, distribuir, difundir, exhibir, reproducir, transmitir, comercializar, ofertar, intercambiar y compartir imágenes, audios o vídeos de contenido sexual íntimo de una persona, a sabiendas de que no existe consentimiento, mediante materiales impresos, correo electrónico, mensajes telefónicos, redes sociales o cualquier medio tecnológico.

La Ley Olimpia no solo permite que se reconozca la violencia digital como otra modalidad de violencia y, por ende, que exista una penalización por su ejercicio, sino que desestigmatiza un tema tabú y contribuye a que cambien los prejuicios, roles y estereotipos hacia las mujeres y demás personas que están en una situación de vulnerabilidad cuando su intimidad es expuesta.

La trayectoria de Olimpia Coral Melo y su labor en política y activismo hizo que la otorgaran el reconocimiento de la revista Time en 2021 como una de las cien mujeres más influyentes del mundo. Además, formó en Puebla la organización Mujeres contra la Violencia de Género y, posteriormente, se mudó a la Ciudad de México para crear, con otras mujeres, el Frente Nacional para la Sororidad, que tiene como objetivo prevenir la violencia virtual.

Olimpia declaraba sobre su influencia en la política mexicana:

“Las instituciones deben decirle a los jóvenes cómo tener una vida online sexual segura. Queremos estar seguras en internet. Que quede claro que lo virtual es real. Ya no soy ‘la gordibuena’. Ahora mi nombre se asocia a una ley que pena los abusos en internet”.

 

Si te interesa ahondar en la cuestión de la violencia de género en las redes sociales te invitamos a leer el siguiente artículo: https://perifericas.es/blogs/blog/redes-sociales-y-violencia-de-genero

 

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