Por Molly Erin, estudiante de Psicología en la Universitat de Barcelona, actualmente especializándose en cuestiones de género, con especial atención a la salud menstrual y la sexología
«Las herramientas que tengo no sirven para matar pero son perfectamente útiles para dar miedo y para aterrorizar a un sistema heteropatricarcal que se ha quedado completamente desfasado (aunque nunca fue justo). Lo que hago, lo hago también por todas las muertas y muertos que perdieron sus vidas porque sus sexualidades o sus géneros traspasaron la frontera de la norma(lidad). Mis armas son mi cuerpo, mi palabra y mi rabia».
Diana J. Torres se presenta ante el mundo como pornoterrorista, marimacho, bollera, delincuente, desviada…y todas las demás etiquetas que en algún momento le han sido lanzadas a modo de ataque o insulto. En Pornoterrorismo cuenta las experiencias vitales que formaron su persona y su espíritu - y forma particular - de lucha contra el sistema cisheteronormativo.
Reclama el derecho a vivir libremente su sexualidad, a disfrutar de las prácticas que cada une desee, y a mostrar las múltiples posibilidades de placer que nos han sido prohibidas y negadas. Mediante performances artísticas, escritas en formato de libros y de blog, se declara activista - pornoterrorista - con la intención de remover el ideario colectivo católico y conservador, para dar a luz un nuevo sistema más libre, más animal, más placentero.
Lo que plantea es realmente innovador: ¿cómo serían tus prácticas sexuales si te guiaras solamente por lo que te apetece, lo que te excita y lo que te da placer, sin interferencias de moralidades y estigmas del mundo exterior? ¿Cómo se siente correrse a chorros en un acto de pura resistencia a la corrección política y las restricciones impuestas por la sociedad?
En favor de la plena libertad sexual
Las prácticas que quedan fuera del sistema cisheteropatriarcal, las expresiones de género no normativas, las conductas consideradas “poco apropiadas” …amenazan y producen interferencias terribles que limitan y condicionan nuestra conducta sexual.
La vergüenza y el miedo a ser humillades - o a dejar de ser considerades sujetos legibles dentro del sistema sexo-género - rigen nuestra sexualidad, restringiendo nuestra libertad y nuestro placer. Un ejemplo claro de las consecuencias de haber sido socializades en una cultura homofóbica y binaria es la negativa de muchos (bio)hombres a ser penetrados analmente, por miedo a perder la categoría de “hombre heterosexual” - ¡aunque la persona que lo penetre sea una (bio)mujer!
¿Cuántos orgasmos posibles habremos sacrificado en nombre de la norma social? ¿A cuánto placer habremos renunciado por miedo a perder los privilegios que el sistema pone a disposición de quienes se le someten? Por supuesto, en un sistema opresivo tan bien diseñado, existe todo un conjunto de castigos para las personas que no obedecen. ¿Cuál es el precio que estamos dispuestes a pagar por la libertad sexual?
Cabe remarcar que, según la autora, para ejercer la libertad sexual no es necesario realizar prácticas consideradas “extremas” como el fisting o el BDSM. Lo que realmente hace temblar el sistema es la elección libre de cada une de las prácticas, les compañeres y sus ritmos sexuales. El día que nuestra ideología y nuestros gustos sexuales nos pertenezcan a nosotres, sin influencias de la religión o la pornografía mainstream, seremos realmente libres para vivir nuestro placer de la forma que más nos guste. El día que podamos deshacernos de las restricciones y roles de género en el sexo - y en cada detalle de nuestro día a día - habremos tumbado el régimen que nos permea y nos violenta.
En definitiva, este es un libro que hace reflexionar sobre la construcción de nuestros deseos, nuestras prácticas y nuestra sexualidad. Plantea temas centrales en el discurso feminista actual: el espectro sexo-género, las resistencias trans, las implicaciones de la prostitución en el sistema de las prácticas sexuales y el consentimiento…desde el activismo artístico y la rebeldía activa contra la norma. Creo que todas, todos, todes podemos vernos reflejades en Diana y su incansable lucha para ser y vivir(se), libre.
¿Quieres reseñar algún libro feminista o participar con tus artículos en el blog? Escríbenos a hola@perifericas.es con tus propuestas, ¡estamos deseando leerte!